Había estado tan
unida a su marido que cuando se encontró en el tanatorio velando su cadáver no
pudo evitar el deseo de que él estuviera a su lado cogiéndole la mano para
ayudarle a pasar tan terrible trago.
Para Cristina Leyva
(foto de Elías Ruiz Monserrat )
Mis padres acaban de cumplir cincuenta y un años de casados, Paz. Esta pieza me ha llevado a ellos porque lo que cuentas es lo que temo que sucederá.
ResponderEliminarUn abrazo,
Me conmueve lo que dices porque lo comprendo y lo temo yo también.
EliminarTus padres se casaron el mismo año que los míos.
Abrazos